Redacción cultura.- Loki, uno de los personajes secundarios más interesantes del universo Marvel, es el protagonista de una esperada serie propia que se estrena este miércoles en Disney+, con una historia que parece una derivación futurista de la española "El ministerio del Tiempo".
Partiendo de una escena de "Avengers: Endgame" en la que Loki (Tom Hiddleston) desaparece en un agujero del tiempo al tocar el poderoso Teseracto (ese cubo de luz azul brillante que se guarda en Asgard, el reino de Thor y Loki), los creadores de la serie construyen una potente historia de esas que le gustan tanto a Hollywood, mezclando todo tipo de líneas temporales.
La acción comienza en 2012, pero pasa también por 1549, 1858 o incluso por el año 79 después de Cristo, nada menos que en una Pompeya a punto de ser sepultada por la lava del Vesubio.
Múltiples escenarios para situar a Loki como un prisionero de algo llamado la Agencia de Variación Temporal, encargada de velar por la Sagrada Línea Temporal, o lo que es lo mismo, la historia tal y como se conoce -en el mundo Marvel, claro-.
Al igual que ocurre en la popular serie española, en "Loki" cualquier acontecimiento que no sigue esa línea temporal amenaza el equilibrio histórico y, por ende, el mundo.
Y también aquí hay personajes -conocidos como 'variantes'- que son los responsables de que las líneas se rompan y se diversifiquen en múltiples sublíneas que en "Loki" pueden derivar en una 'Guerra multiversal' que supondría la destrucción de todo.
Una trepidante y divertida historia que transcurre después de los acontecimientos de "Avengers: Endgame", cuando todos los superhéroes se unen para vencer a Thanos, lo que pasa por destruir las gemas del infinito.
Aunque en "Loki" no aparecen otros superhéroes marvelianos, sí hay guiños a sus historias, como la aparición del Teseracto o de las gemas del Infinito, ahora convertidas en pisapapeles.
Pero se trata de una historia independiente, compuesta de seis episodios de alrededor de 45 minutos cada uno, y que, a tenor de los dos primeros facilitados a la prensa, no parece que se vaya a unir inmediatamente a la historia conocida de los Vengadores.
Aunque, al mismo tiempo y en función de lo que Disney planee para los Vengadores, podría tener un fuerte impacto en su historia porque cualquier cosa puede ocurrir con los múltiples saltos de tiempo, en los que Loki y el agente Mobius (Owen Wilson) persiguen a una variante que está amenazando todo el orden establecido por los Guardianes del Tiempo.
Unos guardianes que apenas aparecen esbozados en unas secuencias de dibujos animados que introducen al espectador pero también a Loki en este mundo paralelo, con una extraña estética ochentera en su interior, que contrasta con la civilización futurista de su exterior.
Junto a Hiddleston y Wilson, el reparto también incluye a Gugu Mbatha-Raw ("The Morning Show"), en el papel de la juez Ravonna Renslayer; Wunmi Mosak ("His House"), como la cazadora B-15, o Sophia Di Martino ("Flowers") y Richard E. Grant ("Star Wars: The Rise of Skywalker"), de cuyos personajes aún no se sabe nada.
Un especie de thriller de ciencia-ficción, con mucho de aventuras y toques del afilado humor característico de Loki en una serie dirigida por Kate Herron ("Sex Education") y con Michael Waldron como guionista principal, un trabajo que ha compaginado con el de "Doctor Strange in the Multiverse of Madness".
"Loki" es la tercera serie que estrena Disney+ del universo Marvel, tras la genial "WandaVision" y la más decepcionante "The Falcon and the Winter Soldier". Para finales de año se esperan "Hawkeye" y "Ms Marvel". Y es solo el inicio del desembarco en la plataforma de Disney de un sinfín de productos televisivos relacionados con estos superhéroes.