Phoenix, Arizona.- De nueva cuenta, el cantante Larry Hernández protagonizó un escándalo en uno de sus conciertos en Phoenix, Arizona, al grado de patear y romper algunos aparatos del escenario.
Sin importar la presencia de sus fans, el famoso del regional mexicano enfureció durante el show, motivos que se desconocen hasta el momento, sin embargo, todo quedó grabado.
Aunque por mucho tiempo se alejó de las polémicas por su actitud, en esta ocasión volvió a hacer desastres en un concierto.
De acuerdo a algunos comentarios que se hicieron en la cuenta de Instagram "Chamonic", quien compartió el clip, internautas aseguran que estaba alcoholizado y se molestó con el staff al tratar de controlarlo.
El intérprete, de 45 años de edad, se puso a patear las bocinas y quebró un monitor, pero hasta el momento no ha hablado del tema y al contrario, agradeció el recibimiento.
Pues enseguida del destrozo, el cantante se dirigió al frente del escenario para continuar cantando, para después acercarse a su mesa de tragos y beber de su vaso.
En redes sociales, además de que lo llamaron clasistamente ‘naco’, apuntaron que con la bocina pudo haber lastimado a sus fans que estaban en primera fila.